Se suceden los intentos para tratar de desarrollar explotaciones de fracking en el Estado español, al tiempo que se incrementan las operaciones de marketing de la industria para justificar la necesidad de esta práctica.
Ecooo considera que existen alternativas suficientes y seguras como para embarcarse en una práctica dudosa y que perpetúa un modelo contaminante.
En los últimos meses, la industria del fracking ha incrementado los intentos de desarrollar esta práctica en diferentes poblaciones del Estado español y ha topado con una oposición de vecinos y colectivos ecologistas ante la inseguridad de la misma.
Cada vez son más los municipios o comunidades autónomas que se declaran libres de fracking por la presión ciudadana o por que los grupos políticos no quieren asumir los riesgos. Cantabria, Benicarló en la Comunidad Valenciana o Valle de Mena en Burgos son solo algunos ejemplos.
Mientras tanto, la industria del fracking ha comenzado una ofensiva mediática e informativa para tratar de convencer de que es una técnica segura y ambientalmente inofensiva.
Para Ecooo el problema del fracking radica en dos elementos fundamentales: los riesgos ambientales y para la salud derivados y la profundización en un modelo energético obsoleto y contaminante.
Ecooo considera que existen alternativas renovables suficientes para generar energía de forma limpia y segura para el medioambiente y la salud. Es incomprensible que una industria consolidada y económicamente viable como la renovable sufra ataques constantes mientras se permite el desarrollo de una práctica controvertida y poco clara como el fracking.
El Gobierno debería apostar de manera clara por las energías renovables, aprobar el Real Decreto de Autoconsumo con Balance Neto y proomover medidas de eficiencia energética en viviendas y transporte.
Ecooo considera que existen alternativas suficientes y seguras como para embarcarse en una práctica dudosa y que perpetúa un modelo contaminante.
En los últimos meses, la industria del fracking ha incrementado los intentos de desarrollar esta práctica en diferentes poblaciones del Estado español y ha topado con una oposición de vecinos y colectivos ecologistas ante la inseguridad de la misma.
Cada vez son más los municipios o comunidades autónomas que se declaran libres de fracking por la presión ciudadana o por que los grupos políticos no quieren asumir los riesgos. Cantabria, Benicarló en la Comunidad Valenciana o Valle de Mena en Burgos son solo algunos ejemplos.
Mientras tanto, la industria del fracking ha comenzado una ofensiva mediática e informativa para tratar de convencer de que es una técnica segura y ambientalmente inofensiva.
Para Ecooo el problema del fracking radica en dos elementos fundamentales: los riesgos ambientales y para la salud derivados y la profundización en un modelo energético obsoleto y contaminante.
Ecooo considera que existen alternativas renovables suficientes para generar energía de forma limpia y segura para el medioambiente y la salud. Es incomprensible que una industria consolidada y económicamente viable como la renovable sufra ataques constantes mientras se permite el desarrollo de una práctica controvertida y poco clara como el fracking.
El Gobierno debería apostar de manera clara por las energías renovables, aprobar el Real Decreto de Autoconsumo con Balance Neto y proomover medidas de eficiencia energética en viviendas y transporte.
Publicado en Reve. Revista Eólica y del Vehículo eléctrico
No hay comentarios:
Publicar un comentario